Descripción
Afanásiev emprendió su obra en el momento más oportuno. Sin él, los tesoros del folklore habrían podido perderse, perecer. El folklore, que durante muchos siglos se transmitiera por tradición oral, de generación a generación, entró a mediados del siglo XIX en una fase crítica, cuando el pensamiento creador del pueblo, incitado por lo nuevo en la sociedad, se orientaba a nuevas metas, y cada día era más raro el arte verdadero de contar cuentos. Afanásiev salvó del olvido con su edición, para transmitirlas a las generaciones venideras, valiosísimas obras del arte popular. Los cuentos conservaron toda la profundidad de su idea, la riqueza de la imaginación, la lozanía de los sentimientos morales populares y la brillantez de su estilo poético.